Clínicas

Plantear la apertura de una clínica es un desafío gratificante que requiere mucha dedicación, compromiso y pasión por la atención sanitaria. Con una planificación cuidadosa y una atención excepcional a los detalles, se puede crear una clínica privada de alto valor.

Para alcanzar este objetivo hay que tener en cuenta:

Planificación y estudio de mercado

En fase de proyecto, es muy recomendable un estudio de mercado exhaustivo para identificar la demanda en el área, estudiar a la competencia y definir el público objetivo. Un plan de negocio sólido es una brújula imprescindible en este viaje.

Formación y Licencias

El personal debe contar con la formación adecuada y ser competente y amable. Esto implica obtener un título oficial reglado y cumplir con todos los requisitos técnicos de licencia y certificación que se establezca en cada región. Además, cada miembro del equipo contribuirá al éxito de tu clínica, así que selecciona cuidadosamente y ofrece capacitación continua.

Instalaciones y localización

El centro debe ser eficiente y eficaz como lugar operativo para lo que fue diseñado, debe cumplir los criterios de imagen corporativa y resultar cálido o acogedor según el tipo de paciente que vaya a tratarse en dicho centro.

Equipo y suministros

Equipar la clínica con instrumental de alta calidad es clave para garantizar la calidad asistencial y la seguridad tanto de los pacientes como del personal. Además, la utilización de aparataje innovador y de las últimas técnicas de gestión sanitaria es algo fundamental para considerar a una marca como consciente, dentro del concepto 5.0.

Branding y comunicación

Un paciente se decide por aquellas marcas que le generan la suficiente confianza como para delegar en ellas su salud. Por tanto, crear una clínica sin un plan de comunicación eficaz que la respalde es bastante arriesgado. Contar con profesionales especialistas en marketing sanitario, que sepan exactamente lo que hace falta para cada situación, es todo un comodín.